En general los Mac funcionan a las mil maravillas, pero cuando algo falla es importante que podamos determinar lo que es lo antes posible. Una de las mejores formas de hacerlo es ejecutar el Mac en modo seguro, un tipo de arranque que desactiva todo lo que no es imprescindible para que el Mac funcione. En los Mac con Apple silicon el sistema para arrancar el ordenador en este modo ha cambiado ligeramente, veamos cómo hacerlo.
La importancia del modo seguro
Cuando un Mac arranca carga multitud de servicios. Cuando uno de ellos es el responsable de cierto fallo que podamos experimentar, la posibilidad de ejecutar el Mac solo con lo esencial es importante para poder aislar y localizar la fuente del fallo. Esto es exactamente lo que hace el modo seguro.
El arranque en modo seguro requiere que el Mac esté listo para arrancar, es decir, apagado, así que antes de nada apagaremos el ordenador. Luego los pasos son muy sencillos:
- Pulsamos y mantenemos pulsado el botón de encendido del Mac hasta que veamos la pantalla de opciones.
- Seleccionamos el disco que queremos arrancar.
- Mantenemos presionada la tecla Shift (⇧) en el teclado mientras hacemos clic en el botón Continuar en Modo Seguro.
- Soltamos la tecla Shift (⇧).
Veremos que, cuando el Mac se enciende, en la parte superior derecha aparece, en color rojo, Modo Seguro, para que sepamos que estamos utilizando este modo. Como recordatorio mencionar que, en los ordenadores con procesador Intel, el proceso, una vez apagado el Mac, es encenderlo y mantener Shift (⇧) presionado hasta que veamos la pantalla donde introducir la contraseña.
En general no deberemos usar este modo para nada, pero si en algún momento encontramos algún error que necesitamos aislar para poder arreglarlo, este será uno de los mejores métodos.